martes, 14 de junio de 2016

Guía Yhorm él gigante y capital profanada




Cuando estés en la Capital Profanada y vayas por la mitad del puente, aparecerá un gran enemigo, pero luchar en esa estructura tan estrecha es una receta para el desastre, así que sitúate tras él y corre. Una vez al final del puente, gira a la derecha y déjate caer.
Sube por la escalera para encontrar la hoguera de la Capital Profanada.
Saquea los cuerpos y recoge el Fragmento de hueso. Vuelve al Santuario para mejorar la hoguera, y luego regresa a la Capital Profanada.
Baja por la escalera y déjate caer por el agujero del otro lado. Ve a la izquierda por la base de la torre y sube por la escalera para encontrar algunas monedas, luego vuelve hacia atrás y sigue alrededor de la torre.
Cuando te acerques a la rampa de madera, el enemigo del puente aparecerá de nuevo. Tiene un ataque de fuego muy potente que debes esquivar, así que rueda por debajo de él mientras cae para pillarlo por detrás. Deja 2500 almas, así que si puedes acabar con él rápidamente podrás usarlo como un punto de farmeo bastante útil.
Sube por la rampa y ve por el pasadizo de la izquierda. Síguelo y mata al insecto gema (pero no te pases y no te caigas por el agujero a lo alto de los escalones), luego gira y acaba con el otro insecto, de nuevo, con cuidado de no caer.
Sigue el pasillo hasta salir a la plataforma de madera, gira a la derecha y saquea el cuerpo del final, luego lánzate al lodo envenenado.
Mantente en tierra firme y seca siempre que sea posible mientras te diriges hacia el edificio.
Alternativamente, si tienes un alto nivel de resistencia al veneno puedes explorar la zona en la otra dirección. Las criaturas del pantano causan daño tanto físico como por envenenamiento, pero puedes acabar con ellas fácilmente.
  • Recoge la armadura del Hechicero de la Corte

Sube por la escalera y sigue por el tejado hasta el agujero del muro. Mata a la criatura del interior; es lenta pero dura, y ponerte detrás suyo es la forma más segura de mantenerte fuera del alcance de su mano/cabeza. Solo prepárate para esquivar de un salto cuando se siente para que no te aplaste.
Recoge la armadura de Hechicero de la corte detrás de las vasijas y vuelve al tejado para continuar.
Sube por las escaleras y ve a la derecha hasta la parte superior del edificio. Mata al brujo y recoge el pergamino que deja por ahí, hazte con las flechas de veneno del cadáver del lado más lejano y déjate caer por la torre circular para recoger la Ira de los Dioses de la habitación inferior.
Vuelve otra vez al tejado y esta vez sigue subiendo por las escaleras para desviarte un momento por la Mazmorra de Irithyll.
  • Mata al gigante

Sigue hasta el final para recoger un anillo y luego gírate para lidiar con los tres enemigos que aparecerán detrás de ti. Asegúrate de que tu barra de vida está en plena forma de nuevo y lánzate por el agujero del muro para acabar con el gigante.
Esta lucha es bastante asequible - simplemente mantente alejado de sus pisadas y ataca sus pies en cuanto puedas - en realidad son las ratas las que peor te lo harán pasar aquí.
Cuando la zona esté despejada avanza por el pequeño arco y sube al ascensor para volver a la hoguera de la Mazmorra Irithyll.
Vuelve a la Capital Profanada. Justo delante de ti en el arco en ruinas hay otra escalera. Lánzate y gira 180 grados.
A tu izquierda hay unas escaleras que han visto mejores días y que te llevan a un puente. Empieza a cruzar y luego retírate, ya aparecerá otro de esos lagartos de piedra. Luchar contra él en el puente no es recomendable, ya que no solo está el riesgo de caer sino también el de alguien por ahí abajo que lanza bolas de fuego.
Cruza el puente esquivando los proyectiles lo mejor que puedas y ve por el arco de delante.
Déjate caer desde la plataforma al montón de restos de abajo y lucha contra otro lagarto de roca, luego baja por las escaleras y gira a la izquierda hacia la niebla para enfrentarte a otro jefe.
  • Cómo matar a Yormh el Gigante

Aunque es posible matar a este jefe usando tus armas normales, probablemente le harás muy poco daño y puede llevarte horas acabar con él.
Por suerte es él mismo quien nos ofrece el arma que le hace vulnerable, así que cuando la lucha empiece corre al altar del final, recoge el objeto y equípatelo - es posible que quieras morir deliberadamente tras recoger la espada para que puedas trastear tranquilamente con el inventario.
Cambia al modo de dos manos (sus ataques no se pueden bloquear, así que no ibas a usar el escudo de todos mdos) y mantén L2/LT hasta que el arma esté totalmente cargada. Requiere algunos segundos llegar a ese punto, tras lo cual deberás descargar el golpe en el enemigo.
Eso acabará con toda tu estamina, pero quedará aturdido durante unos segundos así que usa esa oportunidad para retirarte, recuperar estamina y recargar la espada de nuevo. Repite el proceso hasta que la lucha termine - debería bastar con unos cinco golpes.
(Ten en cuenta que es posible que ya poseas esa espada si has completado la misión Siegward de Catarina, así que puedes realizar la primera carga antes incluso de entrar en la neblina.)
Enciende la hoguera y regresa al Santuario.

0 comentarios :

Publicar un comentario